Mono Araña, Ateles geoffroyi, Sector Santa Rosa, Abril 2015, Fotografía: Luciano Capelli

La fauna arbórea que vive en los ecosistemas tropicales puede verse particularmente afectada por las carreteras, dada su dependencia de la cubierta forestal y la alta vulnerabilidad de dichos ecosistemas a los cambios.

Durante un período de 4 años, seguimos a subgrupos de monos araña que vivían en un bosque tropical seco regenerado (Sector Santa Rosa-Parque Nacional Santa Rosa) con 8,2 km de caminos dentro de su área de distribución.

Nuestro objetivo era entender si los caminos daban forma a la gama del hogar de los monos araña y qué características de la carretera afectaron su movimiento. Sólo el 18% (3 km) del perímetro del área de distribución de los monos araña limita con carreteras; éstas carreteras tenían una mayor disparidad de hábitat entre los lados de las carreteras, que las carreteras dentro del área de acción.

Aunque los monos eran reacios a estar cerca de las carreteras, y el hábitat de la carretera contenía bajas proporciones de bosque maduro, los monos araña cruzaron caminos en 69 lugares (7.5 cruces por kilómetro). La principal característica de la carretera que afectaba a los cruces era el tamaño de la abertura del dosel, con mayor probabilidad de cruzar donde las aberturas del dosel eran más pequeñas.

Nuestros hallazgos apoyan la importancia del tamaño de apertura del dosel para el cruce por carretera de taxones arbóreos, pero también indican el papel relevante que puede tener la estructura del bosque en la carretera. Minimizar el tamaño de la abertura del dosel y las perturbaciones forestales a lo largo de las carreteras pueden facilitar el movimiento de la fauna arbórea y preservar el importante papel de los monos araña y otros taxones arbóreos en la dispersión de semillas y así el mantenimiento y regeneración de la diversidad forestal.

Fuente de información: http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1111/btp.12441/full