BioAlfa tiene como meta facilitar la bioalfabetización de todas las personas. Con el Liceo Dos Ríos tendrá la oportunidad de incorporar personas jóvenes que pueden contribuir a conocer y conservar la biodiversidad silvestre de Costa Rica y simultáneamente ser un ejemplo para el mundo.
Rótulo instalado en Liceo Dos Ríos, Proyecto BioAlfa, marzo 2023, foto: Melissa Espinoza
Hace pocos años, nació el concepto de facilitar la bioalfabetización de Costa Rica o el proceso BioAlfa, el cual adopta la meta de que toda la gente llegue a conocer los millones de especies silvestres del país, ¿Quiénes son? ¿Dónde viven? ¿Qué hacen? ¿Cómo encontrarlas cuando se requiera? y poner toda esta información en internet para que esté disponible al público.
El concepto base es que si uno conoce su biodiversidad, es capaz de leerla, puede aprovecharla sin dañarla, se unen fuerzas para su conservación con las personas que quieren que la biodiversidad silvestre sobreviva por sí misma.
Este proceso de conocer la biodiversidad ha estado en movimiento en Costa Rica por más de tres siglos, pero en gran parte ha estado enfocado en seres grandes como plantas, aves, mamíferos, peces, ranas, etc. Pero además, Costa Rica tiene por lo menos más de medio-millón de especies de insectos y otros artrópodos como arañas, mil pies, ácaros, alacranes, entre otros. Mucho más especies que las existentes en organismos grandes.
Entonces, no hay mejor manera para que la gente llegue a conocer su propia biodiversidad silvestre que participar ellos mismos en el proceso de descubrir e inventariar su propia biodiversidad silvestre. El personal del Área de Conservación Guanacaste (ACG) ha estado haciendo esto desde 1985, enfocado en las tierras de parques y áreas privadas colindantes, ya incorporadas al ACG. Pero, ya con el respaldo del decreto se oficializa el concepto de BioAlfa como de interés público nacional, ACG eligió ampliar este esfuerzo para facilitar la acción del inventario en otras partes del país, de manera que sea realizado por diferentes grupos de personas, en albergues, plantaciones, y colegios rurales que tienen masas de biodiversidad silvestre a la par.
A la par del ACG está el Liceo Dos Ríos, perfectamente ubicado a unos metros del bosque lluvioso secundario, con una gran fauna de insectos silvestres. Dado que hace años el Liceo pidió interacción positiva con ACG sobre asuntos de educación, los alumnos y sus docentes dieron la bienvenida al concepto de que BioAlfa colabore con ellos en convertirse en el primer ejemplo nacional del inventario de biodiversidad de Costa Rica hecho por un colegio, una actividad tradicionalmente conducida por extranjeros biólogos/taxónomos visitantes o por costarricenses de nivel universitario.
En su forma básica, la actividad principal del proyecto consiste en instalar una trampa Malaise (Figura 1) que por su naturaleza captura insectos voladores (y algunos que van caminando, como hormigas) en un frasco de alcohol (95% etanol). Semanalmente, se cambia este alcohol y su contenido de insectos por alcohol limpio. La captura de cada semana se conserva etiquetada con los datos relevantes y se almacena en un congelador. Luego de seis meses de recolección de trampas y su contenido (muestras ambientales) (24 semanas, 24 frascos por cada trampa) todo el paquete va por DHL al laboratorio universitario en el Centro de Biodiversidad Genómica en la University of Guelph, Canadá para obtener el código de barras de ADN de cada insecto. Esta secuencia de ADN nos permite obtener un código para identificar cada especie recolectada. Muchas de estas especies que capturamos no han sido descritas por la ciencia, pero este proceso es un paso hacia su descubrimiento y descripción final.
Toda esta información será pública en internet dentro de un año o dos, todos estos especímenes quedan almacenados como testigos para la verificación de los datos.
Figura 1. Instalación de trampa Malaise LDR #1 por los alumnos del Liceo Dos Ríos, el 1 de marzo en anticipación de iniciar la recolección el 7 de marzo. Foto: Adriana Alvarado.
La acción particular para el Liceo es también colocar una segunda trampa a unos 50 m de la primera, los insectos que caen en esta segunda trampa serán utilizados para que los alumnos y sus docentes del Liceo los estudien para llegar a conocerlos por su morfología, esto es como ha sido tradicionalmente el caso de identificación para más de 300 años, como se distingue una especies de pájaro de otra, de esta manera los estudiantes van a llegar a darse cuenta de que la identificación por ADN permite una mejor identificación que la morfología; sin embargo, en un futuro, se va a requerir un dispositivo personal para obtener el código de barras y se va a requerir de la existencia de una biblioteca de códigos de barras asociados con los nombres y su información, es en esta construcción de la biblioteca de códigos de barra, hacia donde se dirigen los esfuerzos de BioAlfa actualmente.
El proceso de sacar el código de barras cuesta hoy en día $1 por insecto. Dado que una trampa de Malaise puede capturar hasta 20,000 insectos en seis meses, el costo substancial ha sido cubierto por tres fuentes (un donador privado y dos fundaciones internacionales) recaudado por el Guanacaste Dry Forest Conservation Fund, una ONG dedicada totalmente a la sobrevivencia de la biodiversidad de ACG.
El proceso de usar trampas de Malaise adentro del ACG por décadas nos ha mostrado que para empezar a capturar todas las especies presentes en el sitio, deben haber por lo menos dos ubicaciones de trampas, una en el margen del bosque y una adentro el bosque en la pura sombra, debido a esta ecología, se han instalando tres trampas para que el Liceo Dos Ríos empiece el proceso de conocer su biodiversidad, sus insectos. La trampa #3 ubicada en la sombra del bosque será tratada igual a la trampa #1 instalada en el margen del bosque. Estamos anticipando que la fauna de insectos será bastante diferente en las especies capturadas por la trampa #1 y la #3. La trampa #2, se encuentra visible desde los edificios del Liceo, la fauna atrapada en ella será examinada de cerca por los alumnos.
Desde el 2022 en coordinación con el Ministerio de Educación Pública (MEP), se incorpora en la línea estratégica del Plan de Trabajo del Convenio de Cooperación MEP-MINAE al Liceo Dos Ríos de Upala que gracias a su ubicación y su interés expresado hace años, es elegido para ser el primer centro educativo a nivel nacional que forme parte del proceso BioAlfa.
Este proceso permite conocer e identificar la biodiversidad silvestre del país para su integración con la sociedad y genera conocimiento sobre taxonomía, biología y ecología de las especies terrestres y de agua dulce del territorio nacional. El proceso es realizado por medio de códigos de barras de ADN, que es un análisis molecular, lo que permite tener identificaciones confiables de cada especie que hay en el país, mediante la construcción de una biblioteca digital de los códigos de barras, la cual es construida por cualquier estudiante y docente como participantes activos.
Esta alianza de Liceo Dos Ríos (MEP), BioAlfa (GDFCF) y ACG, tiene como objetivo integrar a la comunidad educativa en un proyecto piloto que aportará insumos y enriquecerá al Inventario Nacional de la Biodiversidad de Costa Rica, en la búsqueda de facilitar la bio-alfabetización del país (BioAlfa) y así, aportar a la construcción de la plataforma de información de los recursos naturales del país (biodiversidad silvestre), contribuyendo de esta forma a la conservación y por tanto a la actividad socioeconómica.
Para ir concretando el objetivo de este proyecto se realizaron una serie de actividades en conjunto con el personal docente del Liceo Dos Ríos, ACG (PEB), MINAE, CONAGEBIO, SINAC, y Guanacaste Dry Forest Conservation Fund (GDFCF). Entre estas se pueden mencionar: reuniones virtuales con presentación de charlas para comprender el proyecto, visitas de profesores del Liceo y funcionarios de CONAGEBIO al ACG en mayo del 2022 donde recibieron una explicación del proyecto de parte de Drs. Daniel Janzen y Winnie Hallwachs, análisis de parte de funcionarios(as) del PEB para lograr integrar las actividades de BioAlfa en la maya curricular del MEP, la realización de un taller sobre BioAlfa dirigido al personal docente del Liceo de Dos Ríos en setiembre del 2022, facilitado por el PEB, GDFCF y CONAGEBIO. En este taller se propusieron actividades que pueden desarrollar los docentes para lograr la integración de la información BioAlfa-Currículo y se sensibilizó a los estudiantes con el tema de interacciones del ser humano con la vida silvestre. El 9 Febrero del 2023 se realizó una visita preliminar de integrantes del proyecto BioAlfa para definir los sitios donde se colocarán las trampas de Malaise.
El pasado 7 de marzo del 2023 se inició el proceso de biomonitoreo con los docentes y estudiantes por 6 meses de manera continua. En este lapso, ellos recibirán talleres de identificación de insectos, uso de la plataforma de información, y análisis de datos.
Primer semana de captura de insectos en las trampas Malaise, marzo 2023, foto: Roberto Fernández
Primer semana de captura de insectos en las trampas Malaise
A través de este proceso se espera que este colegio rural sea ejemplo de la capacidad de sumar a sus estudiantes y funcionarios en la conducción del biomonitoreo de artrópodos de un bosque aledaño a sus instalaciones y esté dispuesto a formar parte y ser modelo de una red de colegios en otras partes de Costa Rica, siempre y cuando existan los recursos disponibles para financiarlo, que involucren diferentes ecosistemas con otras realidades locales y socioeconómicas.
Decreto No. 41767. Declaratoria de interés público del Proyecto Bioalfa.pdf
Instituciones involucradas