El pasado Jueves 20 de Junio del 2019 funcionarios del Programa de Vida Silvestre de ACG atiende una denuncia por cacería de un cocodrilo (C. acutus) en playa Papaturro, La Cruz Guanacaste.
La denuncia fue por medio de una llamada telefónica avisando de que se observaba un cocodrilo muerto en Playa Papaturro, con muestras de violencia hacia el animal.
Al llegar a Playa Papaturro observamos que había un bulto en la arena y varios zopilotes alrededor. Nos dirigimos al sitio y efectivamente era un individuo de cocodrilo el mismo de la denuncia por cacería ilegal.
El animal tenía al menos unos 5 días de haber muerto, ya se encontraba en proceso de descomposición. Correspondía a un cocodrilo adulto, vigoroso, sexo desconocido, completamente entero, con una medida de 2.85 metros de largo de nariz a punta de la cola. El animal tenía ambas patas delanteras y traseras amarradas con un cable eléctrico y se le pudo observar un tipo de herida a la altura del hocico, posiblemente de machete. No se observaron orificios de bala.
No es la primera denuncia que llega a la Dirección de Recursos Forestales y Vida Silvestre (DRFVS) relacionada con cacería de cocodrilos en la zona costera de La Cruz, sin embargo, esta es la única en la que se ha tenido pruebas de la muerte del animal en manos del ser humano.
La única razón por la cual alguien quisiera matar a un cocodrilo es por el miedo de que pueda morder a un humano, hay rumores que años pasados los han encontrado envenenados, otras veces disparados, No se debe matar a los cocodrilos, pues siempre la gente ha convivido con ellos sin incidente. Maike Heidemeyer - Equipo Tora Carey - ETC, El Jobo, La Cruz Guanacaste.
Al estar muerto después de varios días fue movido por las mareas, no se pudo reconstruir en el sitio la escena o el móvil de la cacería, ya que la mayoría de los rastros fueron borrados.
El cocodrilo presentaba signos de maltrato, tenía ambas patas delanteras y traseras amarradas con cable eléctrico y una herida en hocico, se trata de un caso de cacería ilegal de cocodrilos. Ninguna parte del cocodrilo fue aprovechada y tampoco se encontró ningún infractor en la playa.
Hacemos un llamado a la población para que denuncie este tipo de delitos contra la vida silvestre al 2666 5051 o al 1192.