El pasado jueves 04 de mayo 2017 tuvimos un incendio forestal natural, provocado por rayería en el sector El Hacha del Área de Conservación Guanacaste el cual quemó aproximadamente 3,200 metros cuadrados.
Los rayos ocurridos durante las tormentas eléctricas constituyen una causa de incendios forestales muy importantes en otras latitudes, en Costa Rica y concretamente en el Área de Conservación Guanacaste donde hace algunos años se llegó asegurar que era improbable que un rayo fuera el causante de incendios forestales.
Gracias al riguroso registro de las causas que han originado los incendios forestales desde el año 1989, se ha determinado que 6 rayos han sido el motivo de incendios forestales naturales, los cuales han afectado áreas muy pequeñas.
Incendios forestales naturales registrados en Cerro el Hacha:
Normalmente solo el 1% de los incendios forestales son originados de forma natural (caída de rayos), especialmente en lugares secos, según los casos registrados. Además suelen tener uno o varios focos.
Cuatro de estos eventos se ubican en Cerro El Hacha, antiguo volcán fuertemente erosionado por el paso del tiempo, con una altitud de 600 msnm, y hoy en día cubierto en su gran mayoría por unas gramíneas nativas, Bulbostylis paradoxa, Trachypogon plumosus, arbustos de Roupala montana y Curatella americana entre otros.
Aunque suelen ser dañinos y perjudiciales para el ser humano y la vida silvestre, los incendios que surgen de forma natural desempeñan un papel esencial en la naturaleza como en el caso de la Bulbostylis paradoxa que su floración empieza a aparecer 12 horas después del fuego.
Los incendios forestales naturales devuelven nutrientes al suelo al quemar materia muerta o en descomposición. También sirven como desinfectantes, al eliminar plantas plagadas de enfermedades e insectos dañinos de los ecosistemas forestales. Además, al quemar copas de árboles y maleza espesas, los incendios permiten que la luz solar llegue al suelo del bosque, con lo que posibilita el crecimiento de una nueva generación de plantas.
El fuego del 4 de mayo 2017 avanzó por la cima cubierta de pastos naturales del cerro El Hacha, pero después la lluvia que da fin a la estación seca también se encargó de apagar el incendio que provocó el rayo, quedando totalmente liquidado.