En febrero del 2020 recibimos en ACG a una delegación de Colombia y Ecuador, conformada por representantes de institutos de investigación, gobierno, empresas, academia, organizaciones, entre otros; con perfiles de alto nivel y con poder para la toma de desiciones.
La visita tuvo como objetivo conocer los éxitos y fracasos en la conservación de Costa Rica y especialmente compartir la historia y experiencias del ACG en su modelo de administración, manejo y uso de la biodiversidad.
Visita a estación San Gerardo, explicación de parataxónomos a integrantes del taller, febrero 2020, foto: Melissa Espinoza
Colombia se preparaba en ese momento para desarrollar un proyecto similar a BioAlfa de Costa Rica en las 127 hectáreas de la Ecoreserva La Tribuna donde se ubican el bosque seco tropical huilense dedicado a la conservación e investigación de la biodiversidad.
“BioAlfa” es un proyecto nacional que permite conocer e identificar la biodiversidad silvestre de Costa Rica para su integración con su sociedad, iniciativa que genera conocimiento profundo y público sobre la taxonomía, biología y ecología de las especies terrestres y de agua dulce del territorio costarricense.
Para los participantes en este taller, las experiencias vividas, procesos expuestos y giras realizadas en el ACG durante una semana fueron muy importantes, sirviendo de modelo para concretar el proyecto "Fibras" y ejecutarlo actualmente como una iniciativa pionera en Colombia integrada por un equipo interdisciplinario de profesionales de las ciencias naturales y sociales del Instituto Humboldt.
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Iniciativa en la que algunos de sus habitantes participan del programa Biomonitores, cuyo objetivo es formar personas no expertas en el manejo y aplicación de herramientas para la caracterización y monitoreo de comunidades de plantas e insectos con el fin de mejorar la información científica disponible sobre flora y fauna.
Este proceso es homologo, muy similar al que se desarrolló años atrás en Costa Rica impulsado por el Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio) y del cual actualmente el Programa de Parataxónomos del ACG es un ejemplo vivo.
ACG es fuente de vida y desarrollo. Para nosotros es importante compartir experiencias positivas con quienes estén dispuestos a conocerlas e implementarlas, por lo que nos sentimos muy felices que en Colombia estén iniciando con los biomonitores para acelerar sus inventarios de biodiversidad y favorecer su conservación y el desarrollo sostenible.